lunes, 25 de marzo de 2013

EL TRABAJO INFANTIL


Expertos en desarrollo humano señalan que según el tipo de hogar en el que vive un niño y las relaciones que se presentan ante él, repercutirán de manera profunda en el desarrollo psicosocial, debido a que es en ese momento donde ellos delimitan el sentido de lo que significa ser miembro de una familia y posteriormente de una sociedad.

De lo anterior tenemos que la familia forma parte importante de una red de influencias contextuales, los niños desarrollan un autoconcepto más realista, adquieren mayor seguridad de ellos mismos y más control de sus emociones (Papalia et all, 2004). Desafortunadamente en algunos países esta realidad óptima para los niños solo algunos de ellos la gozan debido a que por diversas causas tienen que trabajar, lo cual les hace perder ese desarrollo armónico y pleno, les roba una infancia a la que tienen derecho.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) señala que hay 215 millones de niños en el mundo que trabajan, de ellos hay quienes lo hacen a tiempo completo, así que ni pensar en que asistirán a la escuela, que van a jugar, que se alimentarán de manera adecuada o que se procurará su salud.

Esta misma define al trabajo infantil como “aquel realizado por niños menores de la edad mínima exigida para el tipo de trabajo de que se trate, o el trabajo que, por su naturaleza o sus condiciones perjudiciales, se considera inaceptable para los niños y, por lo tanto, está prohibido” (OIT, 2012:4).

Por lo regular en la mayoría de los casos a lo que están expuestos los niños es al trabajo forzoso traducido en esclavitud, en actividades ilícitas, tráfico de drogas, prostitución y también a los ambientes peligros de trabajo.

Ante esta realidad organismos como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) las Naciones Unidas; en México y otros países de América Latina y el Caribe “La Red Latinoamericana contra el Trabajo Infantil. Redes e innovación para la prevención y erradicación del trabajo infantil” a través de la Fundación Telefónica y la Organización Internacional del Trabajo luchan por “prevenir y erradicar el trabajo infantil no es un objetivo aislado, ni una meta en sí misma, muy por el contrario, forma parte integral de los compromisos internacionales que los diferentes países de América Latina y el Caribe han suscrito y de la agenda de desarrollo que se han trazado” (Red Latinoamericana, 2013).

De la misma forma gente comprometida con la realidad laboral ha buscado intervenir, ejemplo de ello es Kailash Satyarthi, quien es un activista de derechos humanos de la India que ha estado a la vanguardia del movimiento mundial para erradicar la esclavitud infantil y la explotación del trabajo infantil. Esto desde 1980, cuando abandonó una lucrativa carrera como Ingeniero Eléctrico para iniciar una cruzada contra la servidumbre infantil.

Como activista ha dirigido el salvamento de más de 78 500 niños esclavos y desarrolló un modelo de éxito para su educación y rehabilitación. Como activista en todo el mundo, ha sido el artífice de la principal red de la sociedad civil para los niños más explotados, la Marcha Global contra el Trabajo Infantil, que es una coalición mundial de organizaciones no gubernamentales, Sindicato de Maestros y Sindicatos.

Este 21 de marzo de 2013, Kailash Satyarthi  fue el invitado especial del IV Encuentro Internacional contra el Trabajo Infantil en México que organizan la UNESCO, la Fundación Telefónica, la OIT y el Gobierno del Estado de México, donde expuso su experiencia y estrategia contra el maltrato infantil. Ser activistas, reflexionar y actuar ante realidades como esta es compromiso social. 

http://educacionadebate.org/43471/kailash-satyarthi-expone-en-mexico-su estrategia-para-combatir-el-trabajo-infantil/


OIT (2012). Combatir el trabajo infantil. Del compromiso a la acción. Ginebra. Organismo Internacional del Trabajo.

Papalia Diane E. et all (2004). Desarrollo Humano. México. McGrawHill.

Red Latinoamericana contra el Trabajo Infantil. Redes e innovación para la prevención y erradicación del trabajo infantil (2013). Fundación Telefónica y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) consultado el 18 de marzo de 2013 en http://www.redcontraeltrabajoinfantil.com/page/qu-es-la-red

miércoles, 27 de febrero de 2013

EL TRABAJO JUVENIL


La Oficina Internacional del Trabajo (OIT) nos habla de una realidad que se presenta a nivel mundial, donde actualmente se vive una crisis del empleo cada vez más grave, se identifica una desventaja para los jóvenes frente a los adultos, quienes tienen tres veces mayores probabilidades de estar desempleados que los adultos, y más de 75 millones de jóvenes en el mundo están buscando trabajo.

Frente a esta situación la OIT ha advertido sobre el riesgo de una generación de trabajadores jóvenes determinada por una mezcla peligrosa de alto desempleo, creciente inactividad, trabajo precario en los países desarrollados y de un aumento de trabajadores pobres en el mundo en desarrollo.

Existe una necesidad urgente de llevar a cabo acciones y políticas que transformen esta tendencia actual, es aquí donde entra la coyuntura e iniciativas de la sociedad, gobiernos, instancias de carácter nacional e internacional.

“Sólo con una acción colectiva firme y una colaboración en los planos nacional, regional y mundial podremos mejorar la grave situación de los jóvenes en los mercados de trabajo” (OIT, 2012: 3).

El hecho de invertir en el capital humano para un país debe considerarse en este sentido estricto como una inversión y nunca como un gasto, es una inversión que se plasma en la calidad humana de los ciudadanos, en un cúmulo de educación que se transmite entre las generaciones, se traduce en menores antivalores sociales, fuerzas de trabajo que pueden contribuir en el desarrollo social.

Tiene que ser parte de esta inversión el generar las condiciones propicias para que este capital humano pueda desarrollarse en las disciplinas en las que se formaron, aplicar sus conocimientos y tener el escenario adecuado.  

Como lo expresa la OIT invertir en los jóvenes es invertir en el presente y en el futuro de nuestras sociedades. Se ha adquirido mucha experiencia sobre la forma de hacer frente a los distintos obstáculos con que tropiezan los jóvenes para entrar en el mercado laboral, pero en muchos países, las políticas ineficaces, no han logrado generar suficientes empleos. El compromiso político y los enfoques innovadores son indispensables para mejorar la situación.

OIT (2012). La crisis del empleo juvenil: un llamado a la acción empleo juvenil Ginebra. Oficina Internacional del Trabajo. Consultado el 15 de enero de 2013 en http://www.ilo.org/global/topics/youth-employment/lang--es/index.htm

OIT (2012). Las tendencias mundiales del empleo juvenil, Ginebra consultado el 20 de enero de 2013 en http://www.ilo.org/global/topics/youth-employment/lang--es/index.htm

sábado, 12 de enero de 2013

AYUDAN EGRESADOS A MUNICIPIOS

Los estudiantes que egresan de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI) están comprometidos con su formación, hecho que se evidencia en los resultados del trabajo recepcional que presentó Teresita de Jesús Méndez Rebolledo, egresada de la Maestría en Investigación Educativa del Instituto de Investigaciones en Educación (IIE) de la Universidad Veracruzana (UV).

Con el título “Los egresados de la Universidad Veracruzana Intercultural (UVI), sede Huasteca, generación 2005-2009: trayectoria laboral y académica”, la investigación de la universitaria presenta respuestas a las interrogantes cuáles son los antecedentes educativos y socio-familiares, qué características tienen las trayectorias de los egresados, qué sucede con ellos al terminar sus estudios.

“El planteamiento y justificación de la investigación se fundamenta en la importancia que tienen los trabajos con egresados, en la riqueza de las consideraciones respecto a sus experiencias sobre la aplicación del programa educativo en los diversos espacios en los que se desenvuelven”, explicó Méndez Rebolledo.

El estudio estuvo dirigido por Juan Carlos Ortega Guerrero, investigador del IEE. El examen de grado fue presidido por María de Lourdes Casillas Muñoz, de la Coordinación General de Educación Intercultural y Bilingüe; Mariano Báez Landa, director de la UVI, y Gunter Dietz, investigador y director del IIE.

Teresita de Jesús apuntó que los objetivos de la investigación fueron: explorar el impacto del programa educativo en las trayectorias de egresados y en sus expectativas; describir el proceso de incorporación al mundo laboral e identificar si dan o no continuidad a sus estudios y la forma de cómo lo realizan.

Méndez Rebolledo destacó tres resultados. El primero tiene que ver con las trayectorias de egreso tanto en lo laboral como en lo académico, dado que se encontraron actividades relacionadas con la formación recibida en la UVI. “Con esto se puede afirmar que se tiene egresados comprometidos con su formación en la UVI desarrollándose en sectores laborales vinculados con la Licenciatura en Gestión Intercultural para el Desarrollo y las orientaciones de Comunicación y Sustentabilidad”.

Dentro de los principales trabajos que desempeñan los egresados se cuentan: promotor, en el fomento agropecuario, gestor, creador de proyectos productivos, impulsor cultural y docencia. 

“En este sentido, son jóvenes comprometidos con su formación académica, quienes han realizado cursos y diplomados principalmente; como expectativa quieren continuar sus estudios de posgrado en relación con los ya cursados en la UVI en tópicos como: administración financiera, gestión pública, desarrollo sustentable, políticas públicas, gestión municipal, medios de comunicación, desarrollo de las comunidades, promoción cultural, derechos de los pueblos indígenas, arquitectura, agroflorestería y desarrollo regional”, detalló la egresada.

El segundo de los resultados fue sobre el valor que los egresados otorgan a las costumbres y tradiciones, reflejado al momento de compartir sus experiencias como universitarios: “Expresan el reconocimiento que los miembros de sus comunidades otorgan a ellos y también a la UVI, como impulsores y promotores de los saberes comunitarios, ritos y danzas”.

Para concluir, el tercer resultado que enunció Méndez Rebolledo fue en cuanto a las expectativas académicas, laborales y personales de los egresados, las cuales tienen como aspecto común la aspiración para generar proyectos, como promotores impulsores de las actividades productivas, “donde los egresados promueven a sus comunidades con los conocimientos de gestión y su carrera poniendo en juego las competencias, perfil de egreso y campos profesionales, acciones que México necesita para el desarrollo social”.



http://www.monitoruniversitario.com.mx/de-ultima-hora/egresados-de-la-uvi-comprometidos-con-sus-comunidades/


http://elaguiladeveracruz.com.mx/index.php/cultura-articulos/11731-ayudan-egresados-a-municipios

http://revistaera.com/index.php/egresados-uvi-comprometidos-con-sus-comunidades



http://www.cambiodigital.com.mx/mosno.php?nota=126470

miércoles, 19 de diciembre de 2012

TEORÍA DE LA EDUCACIÓN COMO BIEN POSICIONAL


Esta teoría identifica a la educación como un medio por el cual el individuo adquiere un cúmulo de capital y certificados que lo hace distinguirse en la sociedad, a través de la formación profesional recibida, la cual le permite adquirir una imagen y status frente a los demás, en palabras de Carnoy (1982) esto se traslada a que la educación hace posible como criterio de selección la asignación a diferentes clases de empleo.

Características de esta teoría se encuentran en las investigaciones de De la Garza (2008) en la década de 1970 en México, cada vez se encuentran más marcadas acciones laborales señaladas por la sociología del trabajo, como son: mano de obra barata, el empleo informal, la pérdida del Estado de bienestar o benefactor, donde “el hombre estaba dominado por estructuras burocráticas y concepciones estructuralistas que le asignaban una posición en la sociedad o una tarea histórica a desarrollar”. El trabajo que proporcionaba el Estado hacía que se tuviera una posición frente a la sociedad a través de un trabajo (De la Garza; 2008: 31).

El bien posicional estuvo determinado en diversos casos por el Estado, donde su papel fue como medio para asignar ese status en la sociedad, sin embargo, se ha modificado. De Garay y Fresán Orozco (2000) afirman que en los años 90 las perspectivas de trabajo han sido sombrías para los egresados de los sistemas educativos. En muchos países relativamente ricos, así como en las naciones en desarrollo, existe un desempleo considerable de los graduados. Sin embargo, sigue siendo, un hecho constatable que ha mayor escolaridad de las personas las posibilidades de empleo y posición aumentan.

Quienes ingresan a las universidades, lo hacen por motivos como acceder a un empleo mejor, para obtener una posición social relevante, para mejorar las condiciones de vida de sus descendientes, para contribuir al desarrollo del país o de la sociedad, para aprender cosas nuevas y adquirir cultura (Ornelas, 1995: 340).

Los individuos buscan un empleo según la formación recibida, donde los demás miembros del grupo los reconocen y les otorga una posición o jerarquía que los hace distinguirse en la sociedad.

Carnoy, Martín (1982). Economía y Educación. México: Revista del Consejo Nacional Técnico de la Educación, No. 40, Vol. III 4ª. Época, abril-junio.
De Garay Sánchez, Adrián y Magdalena Fresán Orozco, et all. (2000). La Educación Superior en el Siglo XXI. Líneas Estratégicas de Desarrollo una propuesta de la ANUIES. México: ANUIES.
De la Garza, Enrique (2008). Hacia un concepto ampliado de trabajo, mecanoescrito. México: UAM.
Ornelas, Carlos. (1995). El Sistema Educativo Mexicano. México: Centro de Investigación y Docencia, Económica Nacional Financiera. Fondo de Cultura Económica.



viernes, 30 de noviembre de 2012

TEORÍA DE LA DEVALUACÍÓN DE LOS CERTIFICADOS

La escuela otorga certificados o diplomas a sus estudiantes y egresados, durante su formación o al concluirla, estos tienen un valor como lo describe Bourdieu en su concepto de capital cultural en la sociología del trabajo también ha sido estudiado este fenómeno de importancia para la educación en relación con el mercado laboral.   

Dore, Ronald  (1983), pone el siguiente ejemplo: como el número de los que poseen certificados de secundaria es mucho mayor que los puestos disponibles para ellos, algunos deciden que cinco libras como conductor de autobús son mejor que nada, entonces la compañía les da preferencia. Y muy pronto todas las plazas de conductores disponibles son ocupadas por quienes tienen el certificado de secundaria, este certificado ha pasado a ser una cualificación necesaria para ese trabajo.

Los certificados se han llegado a ver como un requisito para la incorporación al mercado laboral, sin embargo, en ocasiones estos no corresponden con el empleo o con el tipo de puesto, entonces los individuos por la carencia de trabajo toman este a pesar de ello. Es así como los certificados a pesar de representar un status o un perfil donde quienes los poseen pueden trabajar, tienden a devaluarse al ingresar a trabajos que no corresponden la formación que respalda el título.

Otro de los postulados que sostiene la Teoría de Devaluación de los Certificados es “la rapidez del proceso de escalamiento hacia las cualificaciones la devaluación de los certificados (y por lo tanto el nuevo aspecto del problema del paro de las personas preparadas) varia de un país en vías de desarrollo a otro” (Ronald: 1983).

Los títulos, grados o certificados escolares que las empresas solicitan para otorgar un empleo se han ido incrementando y con ello devaluando. Es así como un certificado que primero se solicitaba para determinado empleo, actualmente resulta insuficiente.

Los certificados de secundaria superior son los que logran las plazas de conductor de autobús, los licenciados tienen aseguradas las plazas de oficinistas. La presión para seguir ascendiendo la escala escolar se intensifica al mismo tiempo que la presión sobre el gobierno para que edifique más escuelas a fin de permitir a más que lleguen arriba, es difícil verle límites al proceso. Puede que no pase mucho tiempo antes de que la empresa de los autobuses empiece a aceptar Iicenciados como conductores (Dore, Ronald; 1983).

Las escuelas otorgan los certificados y de cierta manera son vistas como un medio que otorga menciones que hacen la diferencia entre quienes compiten por un trabajo.

Los proyectos a los que se refieren a los estudiantes que, ante todo, esperan de sus estudios un título inmediatamente convertible en el mercado del empleo. La finalidad profesional predomina entre los alumnos, quienes conciben sus estudios como una especie de seguro contra el desempleo. (Dubet; 2005)

En contraparte a quienes buscan un empleo y aceptan trabajar en un puesto que no corresponde a su certificado están quienes no aceptan, con esto se genera el desempleo.

Se ha afirmado con frecuencia que el problema del desempleo de los educados procede de la repugnancia de los individuos cultos graduados a aceptar ocupaciones manuales y su persistencia en la búsqueda irrealista de empleos de cuello blanco que consideran dignos de su categoría de "hombres educados” (Foster, 1963: 148).

Es así como la Teoría de la Devaluación de los Certificados presenta dos versiones una que muestra como los títulos tienden a perder su valor, aceptando los empleados un trabajo de menor rango al que podrían aspirar, pero por otro lado se encuentran quienes en afán de encontrar un trabajo digno dejan ir oportunidades laborales.

Dore, Ronald (1983). La fiebre de los diplomas. Educación, cualificación y desarrollo. México: Fondo de Cultura Económica.
Dubet, F. (2005, julio-diciembre). Los estudiantes. México: CPU-e, Revista de Investigación Educativa. Consultado el 20 de mayo de 2011, de http://www.uv.mx/cpue/num1/inves/estudiantes.htm# .
Foster (1963). La fiebre de los diplomas. Educación, cualificación y desarrollo. Citado en Dore, Ronald, (1983). México: FCE.

martes, 23 de octubre de 2012

TEORÍA DE LA FILA

La Teoría de la Fila en palabras de Doeringer y Piore (1985) explican que esta es el tamaño de la oferta de fuerza de trabajo que existe para un mismo puesto y que se materializa como una “fila” de aspirantes a este. Hay vacantes de empleo y los interesados en él se presentan, son varias las personas que lo solicitan, sin embargo, en menor número quienes se podrán beneficiar.


Estos autores hacen evidente la figura de los empresarios, pues como dicen son quienes racionan los puestos existentes entre los trabajadores, según sus preferencias en relación a la contratación.

Bajo esta teoría aparecen las funciones de los empleadores, entre ellas se encargan de determinar las características que tendrá el aspirante al puesto, así como también otorgan las condiciones para una contratación.

Al establecer estos dos elementos: las características de los aspirantes al puesto y  las condiciones de contratación, se generan diferencias entre las personas que solicitan el trabajo. Esto tiene relación con la teoría del capital humano porque las filas se generan en relación al tipo de capital que posee el individuo en tanto a sus conocimientos, habilidades y actitudes así como también por los títulos que posee según la Teoría de la Devaluación de los Certificados que más adelante se describirá.

Es así como algunos aspirantes al puesto de trabajo se distinguen por alto capital que los hace ser los primeros de la fila, sin embargo aquellos que es lo contrario llegan a ocupar puestos de menor rango o pueden encontrarse desempleados.

Aquellos trabajadores más solicitados son los primeros de la fila, dejando que los menos solicitados encuentren trabajo en los puestos menos deseables de los sectores marginales de la economía o permanezcan desempleados. Por definición, los desfavorecidos que son los que muestran menor nivel de empleabilidad o hayan realizado menor inversión en capital humano, se encuentran situados al final de la cola de trabajo y tienen un acceso limitado a las oportunidades de empleo más solicitadas (Doeringer y Piore, 1985:15).

En esta teoría se habla de tipos de empleo en los cuales comúnmente se generan filas para aspirar a un puesto. Como lo menciona Leseman al describir que las filas de aspirantes se ven en el derecho laboral y su jurisprudencia se esfuerzan en "hacer entrar" nuevas formas "atípicas" de empleo (empleo de tiempo parcial, temporal, estacional o contractual, independiente, a domicilio, subcontrato o un conjunto de una o más de estas formas) en la institución jurídica de la sociedad salarial, en evaluar esas nuevas formas "atípicas" como si fueran las normas de esa misma sociedad (Leseman; 2010).

Las personas llegan al mercado laboral y se encuentran con formas de trabajo esperan ser parte de la fila para conseguir su empleo, presentando la dotación de capital adquirido. Para esta teoría como para la Teorías del Bien Posicional la educación ha sido vista como el medio por el cual los empleadores determinan y otorgar un empleo.

martes, 4 de septiembre de 2012

TEORÍA DEL CAPITAL HUMANO

La teoría del capital humano enunciada por Theodore Schultz (1968) y también abordada por uno de sus alumnos- Gary Becker (1983) -ambos Premio Nobel de Economía, el primero por sus contribuciones al tema de la economía agraria y el segundo en tanto al liberalismo económico-, habla sobre una "inversión" que realiza el individuo para aumentar su formación profesional con la adquisición de conocimientos, competencias y habilidades, con esto el individuo espera mejorar su productividad para con ello tener acceso a mejores espacios laborales.

El concepto de capital humano se fue construyendo a partir de los diversos estudios en economía sobre los temas de los ingresos que percibían los trabajadores, de las variaciones que existían entre los salarios, así como las diferencias entre las posiciones jerárquicas de las actividades que desempeñaban estos.

Así tenemos que estas ideas se relacionan con el tema de la educación, en tanto a que se buscó hacer evidente cómo el capital humano es adquirido en la educación formal e informal (diversos espacios en los que se desempeña la persona: escuela, familia, amigos), además de identificar cómo este influye en la economía al considerar que un país a mayor capital humano tendrá un elevado crecimiento económico, que es un poco la lógica que en muchos casos se ve a la educación como importante generador de la mejora económica de un país.

Sin embargo, por las investigaciones y estudios sobre el tema de capital humano se ha comprobado que dichas afirmaciones no son directas, más bien son complejas, puesto que no pueden ser generalizables, es decir, que sea para todos los casos una hipótesis o fórmula donde a mayor capital exista mayor inserción laboral.
  A partir de esto lo que si es una realidad como lo dice Becker (1983), los aspirantes a un trabajo, acuden al mercado laboral con diferentes calificaciones, unas son a partir de capacidades innatas y otras resultado de tiempo, dinero y esfuerzo dedicados a su adquisición y como señala Brunner (2007) esto tiene beneficios no son solamente individuales sino que, al aumentar la productividad de cada trabajador, echan las bases para la formación de una fuerza de trabajo suficientemente calificada para las tareas del desarrollo económico acelerado.

La teoría del capital humano es un tema que cobra importancia, al hablar de la relación entre la economía-los sectores productivos mas fuertes y sobre las personas que tienen determinados perfiles de educación formal o no que dan impulso a la prosperidad del país. Imprimir un sentido a las experiencias de vida, académicas y profesionales implica dar valor a los aprendizajes que nos llevan a ese capital humano que cada uno forma y que cada uno decide dónde colocarlo.  

Becker, Gary S (1983). Inversión en capital humano e ingresos. Madrid: Alianza Editorial, pp.39-64.

Brunner, José Joaquín (2007). Universidad y Sociedad en América Latina. México: Biblioteca Digital de Investigación Educativa. CPU-e. Universidad Veracruzana. Instituto de Investigaciones en Educación.